Bajo el título ‘Invisible Immigrants. Spaniards in the U.S. (1868 – 1945)’, el Centro de Historia de la Bahía de Tampa (TBHC, por sus siglas en inglés) acogerá del 1 de marzo al 3 de agosto de 2025 la exposición ‘Emigrantes invisibles. Españoles en EE.UU. (1868 – 1945)’, dedicada a la cada vez menos desconocida historia de la emigración de miles de obreros y campesinos españoles al país norteamericano a finales del siglo XIX y principios del XX.

“Nos sentimos honrados de ser el primer museo en Estados Unidos que albergue esta excepcional exposición proveniente de España. ‘Invisible Immigrants’ comparte muchas perspectivas e historias únicas que conectan directamente con las de familias locales del área de la Bahía de Tampa”.  

C. J. Roberts, presidente Frank E. Duckwall y CEO del Tampa Bay History Center

Gracias al acuerdo de colaboración alcanzado entre la Fundación Consejo España – EE.UU., la entidad impulsora del proyecto expositivo, y el destacado centro museístico vinculado a la institución Smithsonian, Tampa será la primera ciudad que acoja en Estados Unidos la exposición, que ya ha sido visitada por más de 30.000 personas en su recorrido de norte a sur por España; un periplo que comenzó en enero de 2020 en el Centro de Cultura Contemporánea Condeduque de Madrid y que hizo escala en Gijón, a caballo entre 2021 y 2022, y en Almería, en 2023, marcando en el mapa peninsular dos de las principales regiones de partida desde las cuales los protagonistas de esta diáspora emprendieron el viaje: Asturias y Andalucía.

Tras la huella española en Tampa

Cinco años después, y siguiendo la estela de aquellos intrépidos emigrantes que hace más de un siglo pusieron rumbo ‘al Norte’ en busca de oportunidades, la exposición cruzará el Atlántico para exhibirse en aquellos lugares de la geografía estadounidense donde la presencia de comunidades españolas fue especialmente significativa y próspera.

“Tampa se distingue de otras muchas ciudades vinculadas a este fenómeno migratorio gracias principalmente a la preservación de su rico patrimonio arquitectónico. Paseando por sus barrios emblemáticos encontramos numerosas muestras que aún evocan la vibrante comunidad española que allí existió. Empezar nuestro recorrido en Estados Unidos en un enclave tan singular es, por tanto, un verdadero privilegio”.

María Luque, directora de la exposición y responsable de Asuntos Culturales y Educativos de la Fundación Consejo España – EE.UU.

Precisamente, los centros sociales y de beneficencia que aún perviven en la ciudad gracias al empeño y dedicación de descendientes de españoles de tercera y cuarta generación, el Centro Asturiano de Tampa y el Centro Español de Tampa, este último con sedes en Ybor City y West Tampa, fundados en 1902 y 1911, respectivamente, e inscritos en el Registro Nacional de Lugares Históricos de Estados Unidos, son una buena muestra de cómo la colonia española encontró su lugar en la vibrante y diversa sociedad tampeña de finales del siglo XIX y principios del XX, y fue capaz de progresar a través de redes organizadas de solidaridad y apoyo.

Esta reducida pero enérgica comunidad de descendientes y apasionados por la historia local ha sabido preservar el legado humano de sus antepasados españoles, y no dudaron en colaborar con los comisarios de la exposición, el periodista y cineasta, Luis Argeo (Asturias, 1975), y el catedrático de la Universidad de Nueva York, James D. Fernández (Brooklyn, Nueva York, 1961), cuando estos llamaron a sus puertas, escáner en mano, tras las huellas frágiles y disgregadas de los que llamaron “invisibles”; una investigación de más de una década que les llevó a recorrer 16 de los 50 estados del país y varias provincias españolas, fruto de la cual lograron recopilar un archivo de más de 15.000 fotografías digitalizadas, 300 de las cuales podrán verse en la exposición junto a otros documentos y objetos originales.  

Tony Carreño posa ante la fotografía familiar que ha cedido a la exposición, que retrata al matrimonio de origen asturiano formado por Ysabel Fernández y Manuel Carreño –sus abuelos paternos– y sus cinco hijos en el salón de su casa de Tampa, Florida, en 1925. Foto: Fundación Consejo España – EE.UU./Juan de la Fuente.

En Tampa, la presencia española fue especialmente significativa en el histórico barrio de Ybor City, en pleno corazón de la ciudad, fundado en 1885 por el empresario de origen valenciano Vicente Martínez Ybor y estrechamente vinculado al desarrollo de la industria tabaquera. También en West Tampa, donde miles de emigrantes de origen español, especialmente asturianos, gallegos y cántabros, se desempeñaron como cigarreros, y otros muchos emprendieron negocios comerciales y hoteleros para satisfacer las necesidades de la creciente comunidad.

“La huella española en Ybor City es plenamente visible hoy en día. Ahí siguen en pie las fábricas erigidas por Perfecto García, José Arango, José Escalante… Y también las que sobreviven en West Tampa, levantadas por Andrés Díaz, Pendás & Álvarez, o los hermanos Bustillo”.

Luis Argeo, co-comisario de la exposición.

Había lectores que, por su dicción, por su entonación, por su dedicación, disfrutaban de gran prestigio y eran muy demandados entre los obreros del tabaco, que en su mayoría eran emigrantes iletrados y aprendían, a la par que se entretenían, escuchando grandes obras literarias, o las noticias de actualidad.

De Nueva York a Hawái: la diáspora española en Estados Unidos

Pero no solo en la conocida como “capital mundial del tabaco” se asentaron los emigrantes españoles. La calle 14 de Nueva York, las ciudades de San Luis, Misuri, Canton, Ohio, San Leandro, California, los pastos de Idaho y Wyoming, las canteras de granito de Vermont y Maine, y las plantaciones de azúcar de las islas de Hawái también fueron destino preferente para trabajadores de la industria minera y metalúrgica y pastores provenientes en su mayor parte de las regiones del norte de España, así como para los campesinos castellanos, extremeños y andaluces.

“Hemos documentado presencia española variada y muy reconocible a lo largo y ancho del territorio. En algunos casos, los emigrantes entraban como mano de obra cualificada, aunque la mayor parte se iría adaptando a las necesidades laborales que originaban sus barrios y colonias según crecían en población”.

James D. Fernández, co-comisario de la exposición

Esta exposición ha sido posible gracias a la generosa contribución de sus familiares y descendientes, cuyo entusiasmo ha supuesto un espaldarazo imprescindible para este proyecto que, desde sus inicios, ha querido recoger y reconocer su determinación en la preservación de la memoria de sus familias y, por ende, de la presencia española en la historia contemporánea de Estados Unidos. El inicio de su itinerancia en la ciudad de Tampa, Florida, es el resultado de la colaboración entre la Fundación Consejo España – EE.UU. y el Centro de Historia de la Bahía de Tampa, apoyada por la Secretaría de Estado de Asuntos Exteriores y Globales del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, y el Grupo Cosentino.

En su recorrido previo por España, la exposición ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Madrid, la Fundación Municipal de Cultura, Educación y Universidad Popular del Ayuntamiento de Gijón/Xixón, el Grupo Cosentino, la Fundación Ibáñez Cosentino y el Ayuntamiento de Almería. Ha recibido, además, el apoyo continuado de New York University y su fundación en España, la Fundación Rey Juan Carlos I, Técnicas Reunidas, la Secretaría de Estado de Asuntos Exteriores y Globales, la Embajada de Estados Unidos en España, el Instituto Franklin – UAH, Navantia y Cosentino, y con el respaldo adicional de la Diputación de Almería y del Ayuntamiento de Olula del Río.

Desde sus inicios, han respaldado el proyecto personalidades como la escritora María Dueñas, el reconocido chef y activista hispanoestadounidense José Andrés, el periodista y cineasta Guillermo Fesser, la artista Cristina Pato, y el escritor Eduardo Lago, entre otros.

Más información en la web oficial de la exposición: www.emigrantesinvisibles.com